Reconozco de manera pública que los retos jamás me han metido miedo en
el alma; al contrario, siempre me han servido para conseguir lo que con
anterioridad me había exigido a mi mismo: llegar a donde otros me lo tenían
prohibido.
“Escribiendo por libre”, siempre desde sus comienzos, fue un proyecto
primario. De él dependía ir más allá de mis propias posibilidades. Estoy
contento de todo ello.
Mi tiempo de ahora, que nos es tanto como quisiera, me servirá de mucha
utilidad para dedicarlo todo él a la producción literaria.
Gracias por la continuidad de vuestras visitas, y recuerden en todo
momento que un adiós nunca es para siempre.
Agosto 2014